lunes, 6 de mayo de 2013

ISLA CRISTINA, UN MAR DE MÚSICA


Esta serie de fotografías, que expongo a continuación, son el fruto de la unión de mi afición a la fotografía con la de mi hijo mayor, Ráúl  (8 Años). Apenas ha empezado su andadura por el mundo de la música en el Conservatorio de Isla Cristina, mi ciudad, y para cultivarse musicalmente eligió el Violonchelo o Chelo como instrumento musical, espero que éste sea el comienzo de un largo camino por los entresijos de la música, y lo recorra como la misma ilusión y fuerza con la que se ha iniciado.

Las fotografías están realizadas en la Playas de Isla Cristina, sin utilizar ninguna técnica especial, únicamente en el procesado de las mismas se ha realizado un viraje a blanco y negro. La composición fotográfica  se la debo a mi mujer, gracias Lourdes, por ésta idea y por muchas otras que hacen que nuestra vida en común sea tan especial, como la de hacer que estos comentarios se distancien tanto de lo que os tengo acostumbrado a leer.

P.D. pero para no cambiar mucho mi modus operandi a continuación os dejo una parrafada para que conozcáis un poco mas el Violonchelo.


                                                      VIOLONCHELO

El violonchelo, chelo o violoncello es un instrumento musical de cuerda frotada, perteneciente a la familia del violín, y de tamaño y registro entre la viola y el contrabajo. Se toca frotando un arco (que está formado por una vara de madera sobre la que se tensan cerdas procedentes de crines de caballo), con las cuerdas, y con el instrumento sujeto entre las piernas del violonchelista.

Tradicionalmente está considerado como uno de los instrumentos de cuerda que más se parece a la voz humana. A lo largo de la historia de la música se han compuesto muchas obras para violonchelo debido a su gran importancia dentro del panorama musical al ser éste un instrumento básico en muchas formaciones instrumentales.






domingo, 31 de marzo de 2013

Oporto

Oporto (en portugués, Porto) es la segunda ciudad más importante de Portugal después de Lisboa. Tiene 237.559 (2011) habitantes, además de Vila Nova de Gaia, que forma parte de su área metropolitana de 1.816.045 habitantes. Contornan el núcleo central de la ciudad de Oporto la subregión de Gran Oporto y de manera más amplia el Área Metropolitana de Oporto. Se encuentra en el norte del país, en la ribera derecha del Duero en su desembocadura en el océano Atlántico. Es sede del Distrito de Oporto, en la Región Norte de Portugal.
El municipio de Oporto tiene 15 freguesías (equivalentes a parroquias o barrios). Limita al norte con Matosinhos y Maia, al este con Gondomar, al sur con el río Duero y Vila Nova de Gaia, y al oeste con el Atlántico.
Como muchas ciudades europeas, Oporto es una ciudad antigua que cuenta con un amplio patrimonio histórico, aunque durante las últimas décadas ha sido sometida a una amplia modernización. Cuenta con el metro más largo de Portugal que cubre no sólo el Centro, sino también zonas de su área metropolitana como Senhora da Hora o Maia. Asimismo, el aeropuerto internacional Sá Carneiro ha sido recientemente ampliado hasta alcanzar una capacidad de 16 millones de pasajeros anuales.
Desde muy antiguo hay una pugna entre Lisboa y Oporto. Dicen que esta ciudad tiene un cierto aire británico, desde que se asentaron aquí los comerciantes de vino ingleses. Se dice que Lisboa gasta, Coimbra estudia, Braga reza y Oporto trabaja.
Su centro histórico ha sido declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Otros atractivos turístico-culturales son la Torre de los Clérigos, realizada por Nicolau Nasoni, la Casa de la Música y la Fundación Serralves dedicada al arte contemporáneo, y que es el museo más visitado de Portugal. En el margen sur del río Duero se encuentran las famosas bodegas de vinos aunque de ese margen del río ya no es Oporto sino Vilanova de Gaia. Dista de la frontera española (Galicia) unos 140 km que pueden recorrerse por autopista.
Tanto el país como el vino de Oporto (Vinho do Porto), u Oporto a secas, deben sus nombres a la ciudad de Oporto, que a su vez significa "puerto". Por su pujanza cultural, demográfica e industrial es considerada como la "Capital del Norte" portugués.


                                                              PUENTE DON LUIS I

Cuando en 2001 Oporto recibió la capitalidad cultural de Europa, junto con Rotterdam, el eslogan utilizado para promocionar dicho evento fue Pontes para o futuro (Puentes para el futuro). Y es que la considerada segunda capital de Portugal cuenta con un considerable número de puentes que enlazan la ciudad a un lado y a otro del río Duero.
El más conocido y célebre de todos es el puente de Don Luis I (Ponte Dom Luís I, en portugués). Su construcción se basa en el proyecto del ingeniero belga Théophile Seyrig, discípulo del famoso Gustave Eiffel, lo que explica la semejanza con la estructura metálica de la Torre Eiffel. Se inauguró en 1886.
Posee dos pisos. El superior cuenta con unos 390 metros de longitud y el inferior con aproximadamente 174 metros. Mientras que por el superior pasa una línea de Metro, la vía de abajo está dedicada a otro vehículos, como coches, autobuses o camiones. Hay pasarelas para que puedan pasar las personas en ambos pisos.
La gran característica del puente es el gran arco de hierro que posee.
Por su fama y belleza, el puente congrega gran cantidad de turistas. Las vistas del piso superior ofrecen al visitante una panorámica del río Duero a su paso por la ciudad, así como los barrios que han nacido a ambos lados del río.







                                                             RIBERA DEL DUERO


La zona más típica de la ciudad de Oporto se encuentra es el muelle de la Ribera, situado en la zona baja a orillas del río Duero. Es una especie de paseo marítimo pero fluvial, lleno de terrazas y bares con mucho ambiente y muy concurrido; también hay varias pensiones y hospederías, y el ascensor que sube a la zona alta, hasta la calle Mouzinho Silveira.

A uno de los extremos se encuentra la Plaza de la Ribera (Plaça da Ribeira), que era el centro de la actividad comercial de la ciudad desde el siglo XIV al XIX, donde se encuentra la
Capilla de Ntra Sra de la Ô. Al final del muelle se encuentra el emblemático Puente de Luis I que comunica la ciudad de Oporto con la villa de Vila Nova de Gaia, donde se encuentran las bodegas de vino. A lo largo del muelle hay distintas empresas que organizan cruceros por el Duero, por lo que una de las estampas más típicas de este paseo son los llamados "rabelos", unos barquitos de madera construidos originariamente para el transporte de los toneles de vino.

La Ribeira es el lugar más típico de Oporto, que además fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.











                                                               RABELOS


La historia de Oporto está ligada al río Duero y a la industria del vino de Oporto. Su mayor atractivo turístico es, precisamente, toda la zona de la orilla del río más cercana al centro histórico. Aquella en la que se concentra la mayor parte de bodegas de vino de Oporto donde, históricamente, envejecía el mosto que llegaba a bordo de los típicos barcos rabelos desde las viñas del este de Portugal. La estampa típica de Oporto es la de los peculiares rabelos surcando las aguas del río frente a algunos de los espectaculares puentes que lo cruzan.




                                          TORRE DE LOS CLERIGOS




La Torre de los Clérigos, así como la iglesia a la que pertenece, se encuentran en el casco antiguo de la ciudad de Oporto, Portugal. Realizada en granito, su altura supera los 75 metros, los cuales se pueden ascender gracias a la escalera interior de más de 240 peldaños.

Tanto la iglesia como la torre son obra de Nicolau Nasoni, uno de los máximos exponentes del arte barroco en la ciudad portuguesa. Comenzó a construirse en 1754 y se concluyó en 1763 a instancias de la Hermandad de los Clérigos Pobres.

Aunque la fachada de la iglesia esté profusamente decorada, la auténtica joya del edificio es su torre de 76 metros de altura a la que se puede subir para contemplar las mejores panorámicas de Oporto y sus alrededores. Gracias a su ubicación, en una de las partes más elevadas de la ciudad, es visible desde muchos puntos de Oporto, por lo que durante muchos años sirvió de referencia a las embarcaciones que navegaban por el Duero.

El lugar donde se encuentra la Torre de los Clérigos recibe el nombre del "cerro de los ahorcados" por ser éste el lugar donde se enterraban a los ajusticiados.
Al contrario que la iglesia, la parte exterior de la torre presenta un estilo menos abigarrado aunque sin alejarse demasiado del estilo propio del autor.






                                           CAPILLA DE LAS ALMAS


    Enclavada en una de las calles más céntricas de la ciudad de Oporto se encuentra la Capilla de las Almas, como se la conoce popularmente, un pequeño templo de estilo neoclásico de finales del siglo XVIII. Lo más destacado del mismo es el revestimiento exterior de azulejos en blanco y azul que poseen sus fachadas principal y lateral, las que dan a la calle Santa Catalina y Fernándes Tomás .

    Los azulejos que decoran los muros exteriores del templo, en número de 15947 cubren una superficie de 360 metros cuadrados, de gran valor artístico, son obra del ceramista Eduardo Leite, que los realizó en el año 1929 en la fábrica lisboeta de Viuva Lamego. En el año 1982 se restauraron los paneles cerámicos, fueron recolocados 2400 azulejos, se hicieron de nuevo 28 azulejos que se habían partido en su momento por desprendimientos, recuperando la fachada a su actual esplendor.